sábado, 5 de diciembre de 2009

Celebrando Nuevamente

Un día frio como hoy, fui testigo de un acontecimiento muy importante en mi vida. No solo testigo ocular. Un evento donde invertí la mayor fuerza de todos mis sentidos. Una felicidad infinita que no se reemplaza con nada. Nace mi hija amada. Mi princesa. Hoy cumple 9 años. Increíblemente, me causa emociones encontradas. Por un lado, ya no quiero que crezca. Por el otro, claro la veo hermosa. Cada día mas linda, mas madura, y llena de energía tierna.

Mi bailarina que lleva ya 5 recitales de ballet. Descubrió el mundo de las letras el año pasado, cuando quedó seleccionada para representar a su escuela con sus cuentos. Al principio, parecía no interesarle, pero al explicarle que ser seleccionada de entre 200 alumnos de su grado es mucho merito. Le ha tocado experimentar las mieles de la gloria. Se ha llevado dos primeros y un tercer lugar en concursos del condado entero en arte. No quepo!

Con su espíritu de mariposa y sirena, ella prefiere hacerse un mundo hermoso, limpio y enamoradizo. Con su exquisita dicción, provoca llamar la atención de los adultos que la rodean. Me causa mucha admiración que desde hace un par de años, al platicar en los minutos que pasamos juntas en el carro, es capaz de resolver problemas razonados que le invento, sin papel ni lápiz, de tres y hasta cuatro pasos.

Cuando entro al Kinder, me causaban risa sus ocurrencias. Ahora, me sorprende su madurez. Hoy le dije que soy muy feliz de tenerla como hija. Que ella y yo tenemos el gran privilegio de compartir nuestra vida juntas. Aunque no necesito un día especial para decirle que la amo, hoy se lo dije mas que de costumbre. Ayer que salimos a disfrutar la nevada, le dije que no se le podrá olvidar que unas horas antes de celebrar su cumpleaños, puede experimentar lo inusual.

A veces me preocupa que por ser la mayor, la presione demás. O por ser mujer, le toque vivir esta sociedad machista con tantos lineamientos inflexibles. Espero llevarla de la mano, y cuando ella quiera, soltarla, a sabiendas que siempre estaré ahí para ella. Pedacito de mi carne. Feliz Cumpleaños a la mujercita mas importante que conozco.

3 comentarios:

Georgells dijo...

Leer tus palabras es entrañable... te imagino perfectamente, madre, feliz, gozosa, "hinchada" de gusto por los logros de ella... la del cumpleaños...

Ya antes te dije, que las felicitaba a ambas, pues hija y madre se gradúan el mismo día. Su nacimiento inaugura su vida y tu maternidad. Su vida seguirá incierta y siempre llena de riesgos, pero eso es lo que la hace precisamente hermosa. Y seguro la vivirá a plenitud viendo tu ejemplo.

Un abrazo a ambas, de nuevo...

G.

Mónica dijo...

Estimado Georgells,

A mi me provoca una mezcla de alegria e intriga tener lectores desconocidos. Me parece genial que me comentes y me comentes tan padre. Te agradezco enormemente tus visitas y tus palabras. Bueno, anteriormente me habias felicitado por mi segundo hijo, ahora por la primera. Mil Gracias.

Tengo pendiente de escribir algo en tu honor. Solo pido paciencia, ando algo apurada con trabajo. Ya esta en el horno though.

Abrazo grande con cilantro color rosa.

Georgells dijo...

Mónica: yo me siento honrado de leer pedacitos de tu vida, honestos y tan vívidos.

Por favor, no necesitas escribir nada "en honor" mío. Sólo sigue siendo tú que es lo que me encanta de tu blog.

Yo hace mucho terminé por aceptar que en la vida conoceremos muchísima gente, a veces sólo de forma tenue, imprecisa y temporal... Sin embargo esos contactos, por el tiempo que duren, me entusiasman.

Y esos abrazos... debes aceptar que son de lo más creativos!!!

G.